El PLAM 2035 - señala la autora, Arq. Liliana Miranda - que fuera publicado por la gestión anterior de la MML en Diciembre 2014, concordaba con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y recomendaba mínimo 8 m2/habitante en nuevas habilitaciones urbanas (indicando que si es posible la meta de 7,2 m2/habitante al 2035), además de 2 m2 de área verde por persona para parques zonales y áreas verdes metropolitanas. Además, el PLAM en su propuesta de espacios abiertos e infraestructura ecológica incluía un nuevo indicador de 24,7 m2/habitante de ecosistemas naturales conservados a distribuirse equilibradamente en el territorio de Lima, demostrando que Lima SI puede lograr este mínimo estándar de 10 m2/pp. A esto faltaba incluir un mínimo de árboles, como Buenos Aires (2 árboles/persona) y Sevilla (un árbol/20 m2 área construida), pero esta propuesta es un gran avance que debería reflejarse en cambios en el Reglamento Nacional de Edificaciones y en Ordenanzas que las gestiones municipales actuales deberían implementar para lograrlo y mejorar tanto la calidad ambiental como la satisfacción de sus vecinos.

En esta oportunidad presentamos solo un caso ocurriendo en el Parque Central del distrito de Miraflores, un lugar emblemático no solo de ese distrito sino de todo Lima, para una mejor comprensión de la magnitud del problema que viene ocurriendo con los espacios públicos y verdes de Lima.

2. La defensa del verde urbano y el espacio público en Lima

Desgraciadamente este no es el caso, tal como lo reportan una serie de conflictos vecinales y en la propia Costa Verde, la situación está empeorando en el 2015, la ocupación del espacio público, jardines, bermas, playas para entregárselo a los autos está imperando y los arboricidios se repiten impunemente a pesar de la protesta y tenaz oposición y defensa que los vecinos hacen de sus espacios, de sus árboles. La escasez y deterioro de las áreas verdes, recreativas y espacios públicos, tanto dentro del perímetro urbano como en su entorno, se puede constatar en una serie de casos en Lima, y lo peor, ejecutado por acciones municipales.

Algunas gestiones municipales de Lima parecen no comprender que los ciudadanos necesitamos áreas para el esparcimiento, la recreación, para el encuentro. Que estos espacios nos entregan una serie de servicios , que entre otros, le incrementan valor a la propiedad inmueble. Estos actos impunes y sin mayor control ni fiscalización ambiental está implicando la destrucción de una serie de espacios abiertos como áreas verdes, parques, bermas laterales, árboles, humedales, de las playas y balnearios y de lugares de especial atractivo bajo el implacable cemento, casos en Magdalena, en el Parque Kennedy de Miraflores y en la Costa Verde con el tercer carril y la reciente construcción de una pasarela sin respetar mínimos criterios técnicos de diseño vial, ni de ciclovías son ejemplos trágicos de cómo se está destruyendo la calidad ambiental en la ciudad. La gran mayoría de estos casos se relacionan cada vez más con la necesidad de espacio para los autos. Lo peor: el silencio de las autoridades competentes.

Es imperativo para Lima, para las ciudades del país, la adopción de una estrategia nacional para gestionar el ambiente de las ciudades. Esto permitiría abordar la atención de tal problemática de forma coherente y sistemática, creando un marco que suscite iniciativas locales basadas en mejores prácticas, dejando a la discreción de los responsables locales la elección de soluciones y objetivos.

La estrategia que se requiere es una que se concentre en el ambiente urbano, sin perder de vista la compleja interrelación con las actividades económicas y sociales, que se sintetizan en las ciudades. La logística de la ciudad debe funcionar y ser eficiente, sin perder calidad. Ese esfuerzo creativo es un reto a la innovación y a la capacidad técnica de los urbanistas y profesionales a cargo lo que desgraciadamente no parece ser el caso hasta el momento.

3. El Parque Kennedy y Estacionamientos subterráneos en calles aledañas

La Municipalidad de Miraflores ha entregado en la modalidad de asociación pública privada al Consorcio de Estacionamientos de Miraflores la construcción de una playa de estacionamientos subterráneos en las calles aledañas al emblemático parque central de Miraflores: el Parque Kennedy, 7 de Junio y alrededores. En su página web de la Municipalidad lo describe así "es el espacio distintivo y, probablemente, la más elocuente muestra de la notable combinación de modernidad, naturaleza y hospitalidad que el distrito brinda a sus vecinos y a los miles de visitantes que llegan diariamente a la ciudad. Miraflores se ha ganado por mérito propio un lugar de preferencia y representatividad en la vida capitalina. Es una ciudad símbolo del avance urbanístico, social y cultural de la gran Lima” , el Parque Central cuenta solamente con un área de 25,000 m2, pero la Municipalidad indica que cuenta con aproximadamente trece (13) metros cuadrados de áreas verdes por persona, sobrepasando el límite exigido por la OMS. Los parques cuentan con buen mantenimiento y se les ve siempre verdes y con flores.

Nos llama la atención y no comprendemos ¿qué puede haber llevado a esta gestión municipal a poner en riesgo su espacio más emblemático y representativo?. Los parques caracterizan a Miraflores, cuenta con una de las mejores calidades de vida y ambiente por su gran cantidad de parques y áreas verdes y si bien el Consorcio de Estacionamientos aduce que la obra tiene forma de “T” y se encontraría bajo las calles Lima y Virgen de la Milagrosa, no pasaría por debajo del parque Kennedy ni afectaría las áreas verdes , ni ningún árbol , como veremos más adelante, esto no estaría sucediendo así. Esta obra busca solucionar la falta de estacionamientos en el entorno del Parque central y proveer 573 espacios para vehículos. Además de mejorar las condiciones de tránsito en la zona, construir un proyecto de referencia desde el punto de vista ambiental y tecnológico así como realizar una explotación de la infraestructura con total transparencia para la Municipalidad de Miraflores.

Todos y cada uno de estos ofrecimientos han sido objetados por una serie de organizaciones vecinales de Miraflores, como los grupos de Miraflorinos al rescate, Pro Miraflores, ACPV, Conexvec, el grupo Ccapac – Perú, Coordinadora de Activistas del Patrimonio Ambiental y Cultural, Arboralidad Memoria cultura futuro, Lima dignidad entre otros, quienes desde el 2011 todos los jueves a las 5 pm manifiestan su oposición a esta obra justo al frente del Local central Municipal y continúan exigiendo la nulidad de este proyecto.

Al Ministerio de Economía y Finanzas le solicitan que cumpla con su función de control de este tipo de concesiones, a la Contraloría de la República que cumpla con fiscalizar, verificar las fallas del proceso para proceder a denunciar, al Ministerio del Ambiente, a la fiscalía ambiental, a la OEFA que proteja el parque y sus árboles, al Ministerio de Cultura que proteja los Monumentos Culturales, a la Municipalidad de Lima Metropolitana que haga respetar la Ley que declara que los parques son intangibles, inalienables, imprescriptibles y que la naturaleza es pulmón de la ciudad. 

Rechazan el doble discurso pues si bien por un lado autoridades hablan de la ciudad sostenible y el uso de la bicicleta, por el otro se promueve el ingreso en auto hasta el mismo centro de Miraflores además de aumentar el nivel de contaminación del aire y la congestión de la vía pública, en un área emblemática, cultural, histórica y un espacio público que hacen del Parque Central de Miraflores un conjunto armónico. Además de haber recibido una serie de objeciones del Ministerio de Cultura por haberse encontrado restos y vestigios históricos, uno de los carteles por ejemplo indica “Parque tiene significado histórico. Un cartel de plantones por la defensa de parques y patrimonio dice: “No profanen las tumbas de los héroes de la guerra con Chile que reposan a los costados de la Iglesia Virgen Milagrosa” , aunque aparentemente, el Ministerio de Cultura sería el único que formalmente habrían dado su visto bueno a esta obra .

En particular, respecto al ofrecimiento de la Municipalidad Distrital de Miraflores y del Consorcio de Estacionamientos que no se tocarían los parques, acompaño aquí solo una de las fotos tomadas por los mismos vecinos y publicadas en su página de facebook, mostrando donde antes se ubicaban hermosos árboles casi centenarios y que han sido reemplazados por pequeños plantones que para lograr el nivel de frondosidad que tenían los anteriores deberán pasar al menos 30 a 40 años más. Los documentos de denuncia y queja de parte de los vecinos han sido innumerables, pero no han obtenido respuesta de parte de las autoridades. El silencio y la inacción respecto a la opinión de los moradores, comerciantes y usuarios del parque central de Miraflores es evidente.

Según Josefina del Prado, vecina de Miraflores “el censo de árboles del parque central realizado entre el 2011-2012 ha sido eliminado del portal municipal, por lo que oficialmente no se reconoce la desaparición de estos árboles ni cuántos son desde esa fecha” , a pesar de las afirmaciones del acalde en el sentido que esa obra no afectaría las áreas verdes del lugar, adicionalmente las infografías que la Municipalidad circulara del proyecto incluían 4 chimeneas o respiraderos sobre los parques ,Kennedy y Central, los cuales se ofreció retirar pero se desconoce el proyecto final, contaminando el aire del parque con el exceso de dióxido de carbono del estacionamiento. 

Adicionalmente, el contrato de concesión permite solicitar la ampliación del área concesionada siempre que haya áreas disponibles (aunque por su ubicación el único espacio de ampliación sería ingresando debajo de los parques), peor aún, la obra ya habría ampliado su área de concesión en varios miles de m2 (monto impreciso a falta de los documentos finales del proyecto), dado el incumplimiento respecto a no respetar los árboles y cortarlos sin mayor aviso ni atención a los reclamos vecinales, existen serias dudas de que este incremento de área entre a perjudicar los espacios del mismo parque.

Según Josefina del Prado “queda igualmente la duda de si el concesionario podría construir en las futuras ampliaciones establecimientos comerciales apartándose de esa manera del sentido u objetivo de las concesiones que otorgan las municipalidades exclusivamente para que se destinen a obras o servicios de interés o necesidad social (Art. 65 de la Ley Orgánica de Municipalidades). Es decir, aparentemente ya se habría desarrollado el proyecto (del cual hay poca información reciente , incumpliendo además el ofrecimiento sobre la transparencia del proceso) para que la nueva área de estacionamiento se amplíe debajo del parque mismo y no solo las vías aledañas, afectando el espacio donde las raíces de los árboles se encuentran, árboles casi centenarios y por tanto requieren al menos de 8 a 10 metros hacia abajo para sobrevivir, seguir creciendo y aumentando su frondosidad. Los vecinos dudan de que se respete la vida de los árboles. Finalmente, el contrato permite ser modificado, precisado o ampliado por mutuo acuerdo de las partes, sin que se considere la opinión de los vecinos, poco garantiza que el conflicto sea adecuadamente manejado y pueda terminar bien.

Por último, otro de los beneficios que se aducía era que se movilizaría una inversión aproximada de 23.4 millones de Nuevos Soles (USD $8’369,536.92) en el corazón del distrito de Miraflores, monto que habría sido largamente incrementado dado el aumento del área de concesión, lo cual, según ofrecen daría una mayor oferta de parqueos con tarifas competitivas, dinamizaría el Comercio de la Zona, creando puestos de trabajo, durante la obra y a lo largo de la fase de explotación así como revalorizando los inmuebles situados en su entorno, con un incremento general de la productividad del sistema económico local, y retribuyendo el 7.5% de los ingresos facturados (descontando el I.G.V.).

Ante esto la Asociación de Comerciantes, Propietarios y Vecinos de Miraflores así como el grupo de vecinos indican que por uno de las condiciones para el otorgamiento de esta concesión fue el anular los estacionamientos en la Avenida Larco, lugares donde todo residente miraflorino tenía derecho a parquear por una hora en forma gratuita, y luego por el valor de S/. 1 por cada hora, beneficio que con esta obra han perdido y que se convertiría en un costo de S/. 10 soles la hora en esta obra, monto que sería reajustado anualmente. Por último, el número de parqueos anulados en superficie, son poco menos que los que se construirían en subterráneo.

4. Conclusiones

Los espacios públicos permiten desarrollar la vida colectiva de una sociedad, son espacios de interrelación, de encuentro, de intercambio de la sociedad, dan las bases para su identidad e historia, se convierten en estructurantes de la Ciudad y la ciudadanía, permiten que una diversidad de actividades se disfruten por todos libremente sin mayor costo económico y constituyen un espacio abierto regulador de las condiciones ambientales. Los parques son también espacios abiertos y públicos, pero se caracterizan por ser espacios verdes, vivos, en el Perú, según el Reglamento Nacional de Edificaciones se reconoce como parque las áreas con superficie viva, verde igual o mayor a 800 m2.

La propia Municipalidad de Miraflores ha sido reconocida por su permanente preocupación por el mantenimiento de sus espacios públicos y parques, proveyéndoles de mantenimiento y tratamiento paisajístico al servicio de los ciudadanos de Lima, del país y turistas en general. Los parques son seguros, proveen diversidad de usos, tienen diseños amables con suficiente iluminación y promueven activamente la inclusión de diversos grupos sociales, no solo de los miraflorinos sino de los visitantes de todo Lima. Miraflores ha sido reconocido por buscar ser un distrito ecológico y ambientalmente sostenible, este es un tema sensible y muy relevante para demostrarlo.

Un parque es y seguirá siendo hermoso y “emblemático”, si cuenta con sus árboles centenarios, y no solo con arbustos o arbolitos recién plantados y sin follaje, no existe árbol que sobreviva sin espacio para sus raíces, no hay parque que regule las condiciones ambientales y nos limpie el aire y nos de calidad de vida si se convierte en el receptor de emanaciones de un estacionamiento (en las ciencias ambientales esto se conoce como una externalidad, transferida de un privado al público, en este caso, a la ciudad) y peor, los parques requieren mantener su tamaño, la política ambiental y de inclusión social no funciona si por el beneficio económico se pierden los beneficios ambientales, sociales y de identidad e historia de un lugar emblemático como el Parque Central.

En el caso del Parque Central, el equipo de la actual gestión del Alcalde Muñoz requiere revisar su actuación, y el MINAM, la OEFA, la fiscalía ambiental deberían actuar y abandonar su inacción, los ojos de los miraflorinos y limeños preocupados por nuestra ciudad y ambiente, los observamos.

Señores alcaldes, protejan sus parques, sus espacios públicos y serán queridos y recordados por sus vecinos con cariño, recuerden: los autos no votan.